La segunda entrega de la ‘trilogía del dólar’ (entre “Por un puñado de dólares”, 1964, y “El bueno, el feo y el malo”, 1966) se mantuvo durante muchos años como la película más taquillera del cine español (es una coproducción entre Italia, España y Alemania Occidental), además de ser uno de los mejores spaghetti western de la historia gracias al toque sucio y personal (cargado de primerísimos planos, personajes icónicos y un genial uso del tempo cinematográfico) de Leone, una fotografía que crearía escuela y una pegadiza banda sonora a cargo de Ennio Morricone. Con un sencillo argumento, Sergio Leone compone todo un espectáculo de miradas, polvo, tipos duros y duelos que no solo hizo las delicias de los amantes del género, sino que volvió a demostrar la maestría del director romano para conjugar las referencias al mejor cine clásico del oeste con la creación de un nuevo lenguaje narrativo y estético en torno al género.
El Manco (Clint Eastwood) es un cazarrecompensas que quiere apresar al Indio (Gian María Volonté), el cual se esconde junto a 14 hombres en su guarida. El Manco, con la ayuda del Coronel Mortimer (Lee Van Cleef), que busca venganza después de que el Indio matase a su hermana, se infiltrará en la banda criminal, aunque no será tan fácil como pensaba.
Aunque la crítica no se mostró muy receptiva debido a su estilización de la violencia, al tratamiento ‘posmoderno’ que Leone hace de los clichés habituales del western (la historia de venganza, el malo cruel, inmoral e impredecible, …) y a una narración un tanto deslavazada (a Leone no parecía más preocupado por la composición plástica y atmosférica); el público convirtió el film en un éxito aún mayor que su predecesor, lo que con el tiempo lo ha posicionado como una pieza fundamental del cine de los 60, una película de culto con secundarios impagables (ese enfermizo Klaus Kinski), perdurables iconos culturales (como el ‘tío de la manta’ interpretado por Eastwood) y una larga sombra, plagada de miradas impasibles, diálogos directos y anti-héroes atormentados y solitarios que va desde Peckinpah a Tarantino.
– Para los que se pregunten cuales serán las mejores películas que se han rodado en Almería.
– Imprescindible para conocer la historia del Spaghetti Western, de Sergio Leone y de Clint Eastwood.
FOTO DE RODAJE
Sergio Leone, Lee Van Cleef & Clint Eastwood en el rodaje de “La muerte tenía un precio”.
BANDA SONORA
Ennio Morricone, ‘Per qualche dollaro in più’: https://www.youtube.com/watch?v=Arl988QXlYQ.
ART WORK
Renato Casaro – Poster apaisado alemán de ‘La muerte tenía un precio’