Documentalista especializado durante los años 70 en musicales genéricos y películas-concierto (“Salsa”, 1976, o “The Grateful Dead”, 1977), Leon Gast viajó en 1974 a Zaire (actual República Democrática del Congo) para grabar un festival de estrellas de la música negra (James Brown, Bill Withers, Miriam Makeba o Celia Cruz) que acompañaría al ‘Rumble in the Jungle’: el épicamente publicitado combate de boxeo que enfrentaba al campeón George Foreman con Muhammad Ali. Pero además del concierto (de donde extrajo “B.B. King: Live in Africa”, 1974), Leon Gast también pasó bastante tiempo con los púgiles, obteniendo gran cantidad de material que por razones económicas nunca llegó a publicarse. 22 años después, con la ayuda del director Taylor Hackford, Gast consiguió terminar este documento único que nos traslada a unos tumultuosos años 70, en los que la resaca del Watergate, los últimos coletazos de la Guerra de Vietnam y el creciente movimiento ideológico y cultural afroamericano conformaban un momento clave en la historia reciente.
Con solo 23 años, Don King concibió un monumental espectáculo deportivo y musical (que se conoció como el ‘Woodstock negro’) que supuestamente exaltaría las raíces y la fuerza de la comunidad negra estadounidense (y su relación con la Africana). Para ello trasladó su circo mediático a Zaire, un país en el que gobernaba con mano dura el dictador militar Mobutu Sese Seko (célebre por liderar el golpe de estado que acabó con Lumumba).
A partir de las imágenes del evento y una serie de entrevistas a implicados y entendidos, Gast logra unos nítidos retratos psicológicos contrapuestos de un altivo Foreman en el papel de villano y un carismático Ali como el héroe; muestra como se vivía en África; pone en cuestión los intereses culturales de aquel interesado macroespectáculo; y además propone un interesante relato del combate en sí mismo (ese que algunos han denominado el mejor combate de boxeo de la historia). Y es que el interés de “Cuando éramos reyes” se extiende de lo político-social a lo deportivo, a lo musical, a lo humano y, claro, a lo cinematográfico.