Ha sido un día de perros, un día donde he perdido a dos amigas (por motivos distintos pero el mismo día), he cancelado mis vacaciones navideñas en el extranjero (con los billetes comprados), faltan un par de días para acabar el mes y no me queda un solo euro. Hora de cenar, en la nevera sólo veo una bolsa de arroz tres delicias riendose desde los dos metros de frigorifico, caliento aceite en la sarten y pongo el arroz congelado, abro una cerveza ¿ y el tabaco ? No queda ni un cigarrillo, mi cartera está vacía, rebusco en los cajones buscando algun dinero bingo 5 euros en monedas de 20, 10 y 5 centimos, bebo un trago de cerveza, bajo la potencia de la vitroceramica y voy a la calle en, busca de tabaco.

Estoy una eternidad metiendo monedas en la maquina de la esquina, compro tabaco ¿un paquete o dos? Mejor dos. Vuelvo a casa, un mal olor me recibe, ¿humo en el pasillo? mierda, la sarten se ha quemado y humea como un tren de vapor, enciendo el extractor, cojo la sarten con la cena quemada y la dejo en el lavadero, abro las ventanas joder no se puede respirar, cierro el resto de puertas, demasiado tarde, vuelvo a la cocina inundada de humo, menuda peste, el extractor está al máximo y las ventanas abiertas, no hay nada que hacer excepto esperar, esperar y maldecir joder.

Entro al salón, menuda mierda de dia, pienso en mi cena quemada, mi estomago ruge, la nevera está vacía y mi mente vuelve a la imagen de la maquina expendendora cenándose mis ultimas monedas que podría haber usado para comprar comida, hago lo que haría cualquier joven soltero varon en mi situación que quiera cenar algo: enciendo un cigarro y lo saboreo, primer plato, si luego quiero postre puedo liarme un puro con la ceniza de la sartén pienso mientras tiro el humo al techo donde parece haber una nube negra condensada.

Joder no puede ir peor este dia, estoy realmente desmoralizado, hundido, acabado, triste, violento, jodido y demasiado cansado como para pensar en hacer algo, miro al techo, a esa especie de humo pegado al techo, pensando en toda la mierda de hoy, ¿puede ir algo peor? Pienso que si, que todo puede empeorar más aun, que pueden venir los asustados vecinos a molestar, o en el mejor de los casos un bombero destrozará mi puerta hacha en mano, enciendo otro cigarro, segundo plato, todo huele a humo, la cabeza me da vueltas, todo se ve negro, negro como este día.

El humo se abre, ante mi, como el mar a Moises, y de entre la humareda aparece ella, toda ella radiante: Nicole, oh si Nicole, tú Nicole, tan joven, tan hermosa, tan rubia, tan fuera de sí como esas hormonas que me hacen cosquillas en la entrepierna. Apareces ante mi, ante mi maldito dia, ohh Nicole, pisando sobre el humo y viniendo hacia mi. Pienso que el monoxido de carbono está afectando a mis organos principales, me siento en el suelo, parece que hay mas oxigeno, giro y mi cabeza y entre una pila de VHS, la vieja etiqueta descolorida susurra: TODO POR UN SUEÑO.

Recupero el sentido, en mis pupilas aun está grabada la visión de Nicole acercándose a mi, tendiendo un viejo VHS, el video donde ella habita, el humo ha ido desapareciendo, el extractor sigue enchufado, en una mano el VHS, en la otra un cigarro, ¿seguro que estoy fumado tabaco?

Ahora lo veo todo claro, como el agua cristalina que diría ‘Alex’ de Large, yo buscaba respuestas, explicaciones racionales, y Nicole vino a traerme esa respuesta entre sus brazos. ¿Porque -y responded también- me ha tenido que pasar todo esto hoy? ¿Porque? ¿Pará que he tenido yo este maldito dia de perros? ¿Porqué tiene que pasarle todo esto a una unica persona en un mismo dia? Ahora se la respuesta, he tenido una visión mariana, el orgasmo de las visiones llevaba la respuesta a todas estas preguntas tatuada en el pecho: todo por un sueño, debemos pelear por nuestros sueños, avanzar hacia nuestros sueños independientemente de lo que suceda, luchad por vuestros malditos.

No importa que tu casa se llene de humo, que tu cena sea un cigarro, o que tu marido te impida ascender en una fantasiosa e ingenua carrera hacia el mundo televisivo, lo importante es luchar por tus sueños y darlo todo por conseguirlos.

Y este es el mensaje (o uno de ellos más bien) que nos transmite Gus van Sant en “To Die For (Todo por un sueño)” 1995, con nuestra adoradisima Nicole por encima de todas las cosas en el papel de rubia tonta (Susie Stone) que persigue el sueño de su vida: aparecer en televisión. Sueño para el que no se detendrá ante nada, ni ante la vida de su fiel y enamoradísimo marido Matt Dillon (Larry).

Un thriller narrado por los protagonistas, como no podia ser de otra manera en esta película de corte documental que intercala entrevistas y apariciones televisivas (todas ellas ficticias claro) de los personajes con la narración en primera persona de Susie Stone desgranando y explicando las piezas de la historia. Nicole como narradora y eje argumental consigue la complicidad del espectador (espero que no sólo el masculino) gracias a dosis de comidicidad bajo su perpetua sonrisa de perversa seductora, seductora de adolescentes que manejará como peones para elaborar una macabra trama que la catapultara hasta el olimpo televisivo.

Fantastico el montaje de Gus van Sant para Todo por un sueño, aunque el metraje final se hace en algunos momentos algo monotono, la narración de la historia se va componiendo in crescendo hasta completar el puzzle en el desenlace, como partes de un juego de diapositivas lanzadas al aire y que se han vuelto a ordenar aleatoriamente en esta pelicula.

Mis neuronas se rebelan y reproducen en mis oídos el sonido de Over my head (Fleetwood Mac) ¿que importa que todo vaya de puto culo? Estamos en este mundo para darlo todo por un sueño, sonrío, enciendo un cigarro, pienso en el cuerpo de Nicole, donde empiezan -o acaban- las piernas de mi amadísima Nicole, sonrio, miro al techo ahora sin humo, y tarareo:

You can take me to paradise,
And then again you can be cold as ice
I’m over my head,
But it sure feels nice.

You can take me anytime you like,
I’ll be around if you think you might love me baby,
And hold me tight.

…