Mucho he oído hablar estos últimos días del segundón Brian Yuzna con respecto al estreno de la esperanzadora “Beyond Re-Animator”. Y poco, o nada, he oído el nombre de Stuart Gordon como el director de la seminal “Re-Animator”, aquel gran éxito de taquilla (aunque parezca mentira) que me atrevo a clasificar como una de las mejores comedias del cine moderno. “Re-animator” hizo de la parodia (y autoparodia) del gore setentero una suerte de oda al humor negro y macabro.

Recuerdo de Brian Yuzna (en la impagable “noche de lobos” de Antena 3) esa oda al sexo pervertido y orgiástico que era “Society”. Donde unos burgueses importantes se las daban de liberales en orgías en las que sometían a las clases bajas. Excelente la participación del creador (de maquillaje o, simplemente, efectos especiales) Screaming ‘Mad’ George con escenas de alto voltaje cárnico, fusionando, de un rojo sanguinolento, fluidos y carne, cuerpos y almas.

Yo siempre he sido un gran admirador de Stuart Gordon, y cuando oí que preparaban una tercera parte de “Re-animator” creí que él estaría al frente (no entiendo porqué no lo está). Creo recordar que “La novia de Re-Animator” ya la dirigió Yuzna, y creo recordar que no me apasionó como la primera. Aunque está claro que la primera parte la vi en un momento de mi tierna infancia en la que ver un cunniligus entre un zombi con la cabeza en las manos a una tia que está más buena que un pan deja huella, mientras que la segunda me llegó en un momento vocacionalmente más pedante. En cualquiera de los casos (y apoyando en todo lo que necesiten a la Fantastic Factory), con Yuzna o Gordon, con la Crapton o la Pataky, seguiré observando las andanzas del empollón de Bruce Abbott y sus sueros zombísticos.